Déjame aquí, déjame decidir mis movimientos, déjame meditar alrededor de mis errores...
Voy siguiendo sensaciones , presentimientos implantados en los que podría ser yo, pero no soy; sólo necesito un poco más de algún ente que no reconozco, algo extra de alguien que lo dio todo, un ligero beso de aquellos que compartes al mundo.

Ahora quiero irme, regresar a los labios desconocidos de ayer, volver a las palabras tras las cuales escondiste segundas intenciones, quizá creerle la aparente sonrisa al conquistador de la noche sin luna o las frases sin sentido al galán de turno.

Ahora déjame irme que no hay motivos que me hagan quedar, que se perfilan postulantes que mantengo en trámite, que cada vez es menos mio el lugar a tu lado

Certezas momentaneas

Aún mantengo las sensaciones de no pertenencia, aún no he creido que algo vaya a cambiar, sólo espero con ansias tu siguiente vuelta a tu verdadero ser, para poder justificar mi huida definitiva y sin contradicciones. Llegué a comprender que es sólo un lazo lo que me mantiene a tu lado, que hay cosas que ya no puedes deshacer, ni podrás reparar en el poco tiempo que dure tu lucha interna antes de volver a perder.

Hey, tranquilo, si derrepente encuentras mi imagen divagando por tu mente, si derrepente al despertar recuerdas mi nombre o antes de dormir sabes que permanecerás sólo tú, tus fantasmas y tu soledad está noche. Se llama nostalgía y ya la conoces, normalmente es consecuencia de nuestros propios errores.

He planeado una estratégia y sólo en este instante tengo la certeza de que en algún lugar me aguardan sonrisas, felicidad quizás robada, quizás aprendida...

Ya todo pasó, fue un sentimiento que vivió poco, sin embargo lo tuve.